miércoles, 2 de abril de 2008

Gloriosos Clasicos

El 1º Clasico
El 18 de junio de 1905, dos días después de que el equipo del Nottingham Forest pasara por Rosario conmoviendo a todos los futboleros de la época, la ciudad se preparaba para vivir otro relevante e histórico acontecimiento. Por primera ves en la historia se enfrentarían Newell´s Old Boys y RC SINA.








El escenario de aquel viejo primer clásico ó match, como se llamaba a los partidos por aquellos primeros años del siglo, fue la Plaza Jewell, que se colmó de los seguidores de ambos nacientes clubes. Por un lado los hinchas de la zona norte y por el otro los hinchas del querido y viejo Newell´s.

El arbitraje estuva a cargo de quien era entonces el presidente de la Liga, Ricardo W. O. Bas y los equipos se presentaron con las siguientes formaciones:Newell´s Old Boys: J. Calosso, J. Hiriart y D. Barcelone, W. W. Wheeler, A. Balbianí y G. Remmy, V. G. Heitz, G. Moore, F. González, J. Viale y A. Lyon Pats.

RC SINA: A. Norris, A. Faggiani y H. Grant, J. Díaz, A. Ellison y H. Boan, Whortley, A. Vázquez, P. Hearnett, S. Hopper y Percy Jones.

El primer tiempo dejo ver una lucha pareja y sin tregua, en el que ambos equipos no pudieron convertir para sacar ventajas, fue 0 a 0 y final de la primer etapa. Pero el destino quería que la gloria del primer clásico del fútbol rosarino fuese roja y negra. Victor Heitz aprovecha un avance a fondo de los rojinegros y le entrega la pelota servida a Faustino González quien remata de corta distancia para que tras la volada de Norris, la pelota se vaya al fondo del arco centralista. Final del partido, es el gol de la victoria, 1 a 0 para Newell´s que se retira aclamado y victorioso.

5 a 0 y al descenso
El 12 de octubre de 1941 Newell´s se convertiría en el verdugo de su eterno archirival.

En aquella memorable e histórica jornada se jugaba la fecha 28 del campeonato de primera división del fútbol argentino y Newell´s recibía en el Parque a un alicaído RC SINA comprometido seriamente con el descenso.

Previo al inicio del clásico y para agravar aun mas la situación, un rumor descabellado flotaba sobre la ciudad de Rosario. Se decía que Newell´s se dejaría ganar en su propia cancha para que así el SINA tuviera chances en los próximos partidos de sumar y no descender. Algo totalmente impensado en nuestros días. Mas tarde, los hinchas de central recibirían durante el partido, la refutación a aquel rumor como un balde de agua fría.A los 33 minutos de la primera etapa, Mario Morosano convertía el primero de la Lepra y 5 minutos después el segundo.

Ese día se convertiría en un día negro en la historia de la parcialidad canalla, es que Newell´s infinitamente superior a su rival, con otro gol de Morosano y dos mas de René Pontoni, decretaba de local, una histórica goleada de 5 a 0 que echaba por tierra con aquel impensado rumor.

Dicha goleada sería la mayor goleada en la historia de clásicos entre leprosos y canallas y se convertiría en el tiro de gracia para un SINA condenado a perder la categoría, ya que a pesar de ganarle a Racing y a Boca, descendería en la última fecha del torneo tras ser derrotado 4 a 2 por Banfield

MI MAYOR ORGULLO TU PEOR HUMILLACION
¡¡¡Bendita sea tu zurda!!!9 minutos para el final, Marito Zanabria mete el zurdazo para que la pelota se clave en el ángulo izquierdo del arco canallaEl panorama empeoró durante la segunda mitad cuando Aimar ponía las cosas difíciles para la Lepra, convirtiendo el segundo del SINA. La hinchada sin aliento segura de que el triunfo era inminente ya festejaba al grito de "Hijos nuestros, hijos nuestros!!!", pero Capurro fue el encargado de que la agonía leprosa no se prolongara eternamente y a tan solo dos minutos del segundo del SINA, achicó la diferencia con gol de cabeza tras un centro de "Cucurucho" Santamaría. Ese gol a los 71 minutos fue la inyección anímica para que Newell´s renaciera. Sin mucho tiempo para cambiar la historia Newell´s comenzó a meter al SINA contra su arco, una y otra ves llegó al área SINA, hasta que en una de
tantas llegadas, Mario Zanabria, la baja de pecho en la media luna del arco y antes que la pelota llegue al piso, de zurda, la clava terriblemente en el ángulo izquierdo de Biasutto. Los de Arroyito no lo podían creer, 2 a 2 y de terminar así las cosas, Newell´s daría la vuelta en territorio SINA y se haría acreedor de una epopeya memorable, por primera ves en su historia saldría campeón y en Arroyito!!! Faltaban 3 minutos cuando la impotencia de los hinchas pudo mas e invadieron la cancha, Dellacasa decidió suspenderlo para reanudarlo mas tarde y adicionar 6 minutos mas que nunca se cumplieron porque ambas hinchadas invadieron el terreno de juego. Entonces llego el final definitivo del partido y la peor pesadilla SINA hecha una triste realidad. Newell´s daba la vuelta olímpica por primera ves en el mismísimo vueltodromo y ante su propia cara.







4 a 0 y no quedo nadie
El 14 de abril de 1991 se disputaba el clásico en el Parque Independencia, era la 8a. fecha del Torneo Clausura y con ella llegaría un resonante triunfo leproso.








Newell´s a los 21 minutos se pone en ventaja, desde la izquierda Ruffini ejecuta un tiro libre para que Pochetino anticipándose a Falaschi, su marcador, meta un cabezazo justo al palo izquierdo de Lanari. El SINA herido trato de adelantarse pero apenas creó un par de situaciones con algo de riesgo, y encima de pelota parada. En el minuto 41 Ruffini nuevamente envió un centro al área y la "Chancha" Cozzoni no perdono, anticipándose a Falaschi y Boggio, la envió al fondo del arco SINA. Final del primer tiempo con Newell´s 2 a 0 arriba.

El SINA obligado a revertir las cosas en los restantes 45 minutos se vio venir la noche ante las constantes arremetidas leprosas que resultaban apenas salvadas por parte del arquero SINA. Cuffaro Russo impotente ante el despliegue de Newell´s le aplicó un golpe a Ruffini y termino expulsado, un claro indicio de un SINA sin recuperación.

La "Chancha" Ariel Cozzoni, con la punta del botín envía la pelota al fondo del arco, era el segundo de Newell´sA los 34 minutos Garfagnoli por el medio se sacaba la marca de Cornaglia de encima y de un derechazo enviaba la pelota junto al palo izquierdo de Lanari, era el 3 a 0. A esas alturas la hinchada SINA estaba enardecida y producía disturbios dado que no aceptaba la paliza que le estaba dando Newell´s, en eso toma la pelota Cozzoni y la coloca por arriba, era el cuarto gol y entonces una ves mas, como ya es típico en los clásicos rosarinos, cada ves que la cosa pinta para goleada, comenzaron una serie de incidentes con ánimos a que el partido fuera suspendido y evitar así una goleada mas abultada, la policía debió intervenir dejando como saldo muchas personas heridas y ciento de detenidos. La hinchada sinaliento desesperada "ABANDONÓ" el estadio en masa, mucho antes del que partido finalizara. Como era de suponerse el partido se suspendió cuando restaban aun 4 minutos para cumplir con el tiempo reglamentario, mas los minutos de alargue que adicionara el arbitro. Esa no era la primera, ni seria la ultima ves, que la impotencia SINA los llevaba a suspender un partido.

La imagen del final fue lapidaria. Quince toques de Newells, una goleada consumada, el delirio desatado en las tribunas y Flores Coronel corriendo hasta Pablo Guiñazú para pegarle duro y terminar con el goce. Impotencia y desesperanza ante la humillación. El resto lo hicieron los hinchas: cantaron hasta 19 (años que Central no gana en el Parque) con el feliz cumpleaños como corolario.
El final fue con ronda incluida. Los pibes de Newells -los 16 salieron de las inferiores- capitaneados por el viejo Larry Saldaña terminaron su festejo agarrados de la mano alrededor del círculo central. Mientras el Profe, con las manos en los bolsillos, eligió el silencio. Su día había terminado mejor de lo esperado. Era un justo premio al orden y a la decisión para ganar.
8 de marzo Dia del Padre



Todo comenzó en Enero de 1992. Newell's estaba clasificado para jugar la Copa Libertadores y para entonces nadie imaginaba lo que pasaría después. Al conocerse el fixture tanto de la copa como del torneo local, una sensación rara invadió a todos los leprosos. La mala fortuna del sorteo dictaminó que Newell's tenía que jugar un domingo el clásico y al lunes siguiente un partido definitorio por la copa. Pero a ese entonces nadie imaginó que perderíamos el primer partido y que quedaríamos al borde de la eliminación de la Libertadores. Por eso era necesario que el lunes 9 de Marzo sacáramos un buen resultado contra Universidad Católica de Chile.



Newell's debía afrontar dos enfrentamientos muy duros en 24 hs. Lo más difícil era decidir cual de los dos era el más complicado. La decisión estaba tomada, íbamos a jugar el clásico con chicos de la reserva con el apoyo de dos jugadores experimentados: el "chocho" Llop y el "pájaro" Domizzi.



El clima antes del partido era de total optimismo para los dirigidos por Eduardo Solari, claro, iban a enfrentar a un equipo que en teoría era muy inferior e inexperto en esa clase de enfrentamientos.



El trámite del partido fue parejo e incluso dominado por "ellos", pero a quien le importa. Todo lo que importa es que a mediados del primer tiempo, un córner desde la derecha fue cabeceado por un jugador que llevaba la camiseta número nueve... ese jugador era el "pájaro" Domizzi.



La locura invadió al 90 % del estadio (como siempre), no lo podía creer, era como un sueño.



Gozamos, saltamos, cantamos y deliramos al compás de un grupo de chicos que defendió la camiseta de Newell's como titanes y volvieron a demostrar quién manda en Rosario... Gracias Pájaro!!!